Blog del Seminario Permanente de Tutorías, para intercambiar experiencias sobre la actividad Tutora en la Preparatoria 3 "Justo Sierra", de la Escuela Nacional Preparatoria.
El tema de la comunicación que fue expuesto en la pluralidad de sus dimensiones está íntimamente relacionado con el tema de la autoestima. Navegamos en un mundo que está saturado, en muchas ocasiones, por prejuicios y preconcepciones. No es el caso que lo prejuicios o las preconcepciones sean malos en sí mismos. El problema está en lo que hacemos con esos prejuicios. Por ejemplo, cuando estos impiden una comunicación asertiva con el otro, el prejuicio bloquea un diálogo que en lugar de hacernos crecer, empobrece nuestra visión de mundo. Por esta razón, la comunicación debe pensarse como un fenómeno complejo y abierto. Si existe una estima de sí y una estima del otro, los otros y lo otro, podremos ponderar mejor nuestra realidad. Por otro lado, es también cierto que a través del lenguaje construimos con preconcepciones el mundo en el que vivimos, en el que ya nos encontramos: historia, lengua, prácticas sociales, culturales y políticas, tradiciones, manifestaciones artísticas, etc. Consideremos igualmente el hecho siguiente. La intencionalidad de nuestro lenguaje varía constantemente, dependiendo del contexto en el que nos inscribamos. En el caso específico de nuestros estudiantes en formación emocional e intelectual, existe una confianza-desconfianza de la que no sólo ellos son responsables, sino todos nosotros como comunidad. Por esta misma razón, se vuelve imprescindible una comunicación constante que no busca abrumarlos, como si siempre nos quedamos con el papel de vigilantes de sus actos, sino como personas que pueden escucharlos y estar ahí cuando lo necesiten, sobre todo en el ámbito académico, que es el que como tutores más nos compete.
Para la sociedad, la juventud es una etapa de transición entre la edad de la infancia y la adulta, pero para los jóvenes el mundo está anclado en su presente y lo más importante es vivir lo mejor posible el momento actual.
La juventud está agrupada por edad y por la forma de pensar y sentir su realidad parecida a la de otros jóvenes, donde se encuentra una gran diversidad de pensamientos y formas de vida a las que distinguimos como “tribus ” o grupos de amigos.
Los jóvenes que habitan el mundo complejo y cambiante de hoy, se organizan en espacios propios donde se acepte la diversidad de formas de expresarse ,integrándose paulatinamente a espacios públicos cada vez más exigentes y competitivos.
La comunicación de los jóvenes es variada y distinta a lo que estamos acostumbrados los adultos, hoy en día la comunicación no necesariamente es codificada, hay una comunidad virtual además de la real, se comparte infinidad de información en la red, hay una falta de diálogo cara a cara. Recibimos infinidad de información a través de las nuevas tecnologías y no toda la llegamos a procesar internamente.
Los adultos se deben de actualizar en los medios de comunicación y preguntar al joven cuáles son sus inquietudes, gustos y dudas, para poderlos orientar y comunicarse con ellos , puesto que la comunicación en los jóvenes es la misma únicamente cambian los símbolos y las formas de trasmitir el mensaje a algo que muchas veces no estamos familiarizado.
Sin duda el profesor, y por supuesto los tutores, requieren mantener una comunicación abierta con sus alumnos para que sea posible desarrollar las actividades escolares en el mejor ambiente posible y, sobre todo, con canales de expresión e intercambio de información funcionales, que permitan un diálogo respetuoso, la reflexión conjunta, la libertad de expresión, la confianza mutua y la disposición a resolver problemas y trabajar colaborativamente. Por supuesto, dicha comunicación tendrá que ser auténtica; esto es, coherente entre el lenguaje verbal y el no verbal, entre las palabras y las acciones, entre el discurso y los hechos. Sólo así será posible ganar la confianza de los estudiantes y su involucramiento en las tareas que como profesores o tutores tratemos de abordar con ellos. Además, como docentes debemos evaluar constantemente si nuestra manera de comunicar instrucciones, requisitos, formas de trabajo, resultados esperados, conocimientos, etcétera, es en realidad adecuada y funcional. Bien podríamos descubrir que detrás de algunas fallas o errores de nuestros alumnos está nuestra propia incapacidad o deficiencia para comunicarnos con nuestros alumnos. Igualmente, debemos de mantener una comunicación asertiva con los estudiantes sin entrar en conflicto, sin agresiones, descalificaciones o insultos, y más bien estableciendo reglas y límites claros dentro de la clase, para las formas de interacción personal y para el establecimiento de un ambiente de aprendizaje o bien una dinámica grupal adecuados; esto es, fundados en valores y formas de interacción personal sanas.
La comunicación concebida como un proceso complejo de intercambio con el otro, debe ser abierta, permisible, clara y distante del prejuicio. Considero que no puede haber diálogo sin una escucha activa que estimule con el tiempo un diálogo asertivo. Desde esta perspectiva la comunicación y en particular con el adolescente se aprecia como una actividad que debe agotar todos sus recursos para que el mensaje llegue con claridad a su destinatario. En el ámbito académico el docente debe ser muy cuidadoso de los mensajes que emite, pues en gran medida a través de ellos se puede ganar la confianza o no confianza del estudiante, lo cual puede resultar según sea el caso, en una condición que lo predisponga de manera favorable o no al diálogo académico.
Silvia tu aportación es muy valiosa y coincido contigo, ya que gran parte de la responsabilidad para que se abra el canal de comunicación con los alumnos depende del docente y en cuanto se rompan las barreras de la hostilidad y logremos un acercamiento con ellos a través del diálogo y nos ganemos su confianza lograremos una mejora en el aprovechamiento académico y en su relación con la otredad.
Tienes mucha razón Juana Silvia. Debemos esforzarnos para que los mensajes sean claros y lleguen al destinatario correctamente. Sucede mucho que los conflictos sociales o interpersonales son causados por errores en la comunicación: Quise decir algo, pero el otro lo interpretó de otra forma y si no se aclara a tiempo, se desencadena un conflicto.
Es un tema delicado, de hecho se dice que » los problemas de realciones sociales empiezan por la boca» y si se dejan crecer, se vuelven guerras. Como profesores y tutores nos corresponde poner mucho cuidado en las palabras que usamos, cómo transmitimos los mensajes, tanto verbales, como no verbales y también debemos hacernos responsables de nuestra forma de hablar porque es modelo para los alumnos.
La comunicación es un proceso de intercambio de información y una necesidad de las personas de las sociedades con el objetivo de poder intercambiar informaciones y relacionarse entre sí. Desde que nacemos ejercemos la comunicación en las diferentes etapas de nuestras vidas y en diversos ámbitos, cuando los estudiantes llegan al bachillerato traen una formación y una educación establecida desde casa, es por ello que cada uno se relaciona de una forma específica, por lo que al convivir con sus compañeros o docentes lo hacen de la forma como fueron formados y ésta no siempre es la correcta, ya que a veces no es lo suficientemente asertiva, ya que no saben escuchar, juzgan, interpretan o simplemente no son empáticos con el otro. Es por ello, que el papel del docente es fundamental en esta etapa de su vida, ya que uno de nuestros propósitos es poderlos orientar para tengan una comunicación más efectiva con el otro. No debemos olvidar que como docentes somos un modelo para los estudiantes y gracias a nuestras enseñanzas y ejemplos ellos aprenderán en la práctica el significado de la comunicación. Mejor aún, cuando somos buenos escuchas y los atendemos con interés y respeto, abrimos los canales de comunicación y de esta forma recuperamos la confianza de los alumnos, creamos un mejor ambiente educativo y los podremos ayudar a mejorar las cuestiones personales y académicas.
No hay duda alguna de que toda sociedad, y el mundo en general, ha evolucionado de una manera acelerada a partir de la década de los años 80 del siglo pasado en todos los aspectos, como he podido percibirlo. La comunicación, tema tratado en nuestro seminario, ha adquirido nuevas facetas al respecto con la la invención y evolución de la tecnología: Tal parece que se vive actualmente en un mundo carente de relaciones interpersonales con la aparición de ésta última y pienso yo que el núcleo familiar es, en parte, responsable de este resultado. Propondría yo que tanto tutores como padres de familia realizáramos una «alianza» con el fin de afianzar la comunicación. Primeramente los padres ojalá dedicasen algunos minutos de su tiempo para escuchar a sus hijos; de ahí, a veces, la carencia de estos vínculos ( y otras muchas circunstancias) lamentablemente ha provocado la desunión familiar. En segundo lugar, si los tutores en su función también de docentes también lográsemos vínculos de comunicación con nuestros alumnos, a pesar de tener grupos numerosos y carga académica excesiva, podríamos lograr frutos abundantes en beneficio no nada más del estudiante, sino también de la sociedad donde nos desenvolvemos todos, gracias a una óptima comunicación. Labor ardua, mas no imposible.
Gracias y saludos a todos.
La comunicación profesor- alumno, desde mi punto de vista, se debe desarrollar en un clima de respeto y, muy importante, cada quien en su sitio. Es decir, no podemos pretender relacionarnos con nuestros alumnos como si fuéramos sus amigos o sus “cuates”, porque nunca podríamos ponernos en su lugar, como si tuviéramos 15 años. Podemos ser amigables, comprensivos, pero nunca iguales que ellos. Ellos necesitan de esa diferencia; necesitan de una figura de autoridad, aunque por definición la rechacen. Podemos inspirar más confianza si representamos un apoyo que si nos llevamos “de a cuartos con ellos”.
Por otro lado, es importante estimular el uso correcto del lenguaje, porque los alumnos usan una lengua española trunca, deformada, pobre y al comunicarse con nosotros se ven obligados a usar la norma culta, porque, por lo menos nuestros alumnos, tienen claro cómo deben hablar con cada quien.
Muy cierto Lilia, En la comunicación que debe haber profesor-alumno debe ser siempre con respeto, y bien ubicado tanto el papel del profesor como del alumno; podemos ser amigables y positivos como muy bien menciona Lilia. La clase no nadamas se debe enfocar en algun tema sino que parte de la comunicación la hacemos corriguiedo el lenguaje que a veces usan, hacerles notar el respeto que se deben todos, y procurarque esa comunicación sea clara, en el pedir estar el dar.
La relación entre autoestima y asertividad consiste en que si no se tiene autoestima; si no se tiene convicción de que se es valioso al igual que los demás; si no se tiene la convicción de ser merecedor de los mismos derechos , y si se tienen ideas ilógicas, absolutistas y muy demandantes consigo mismo y hacia los demás, no se puede ser asertivo, defender los derechos y comunicarnos de igual a igual con los demás.
Estoy de acuerdo con la reflexión del maestro Alfonso Javier
«Tal parece que se vive actualmente en un mundo carente de relaciones interpersonales con la aparición de ésta última y pienso yo que el núcleo familiar es, en parte, responsable de este resultado. Propondría yo que tanto tutores como padres de familia realizáramos una “alianza” con el fin de afianzar la comunicación»
Es verdad que necesitamos una comunicación más asertiva con nuestros alumnos pero para eso necesitamos la colaboración de los padres ya que ellos conocen más a sus hijos,nosotros los profesores únicamente los tenemos por un periodo de tiempo muy breve( ciclo lectivo)para lograr un avance efectivo.
Como profesores y tutores debemos crear un ambiente que facilite la comunicación, permitir que el joven se sienta escuchado, y no criticado o juzgado, pues esto haría que perdiera la confianza en nosotros y estaríamos cerrando los canales de comunicación.
La comunicación eficaz requiere de habilidades sociales tales como escuchar empáticamente, transmitir claramente las ideas propias, entender y debatir acerca de las ajenas, negociar o mediar evitando que los desacuerdos se conviertan en conflictos irresolubles.
La acción comunicativa representa un papel de suma importancia para todo docente, cabe destacar que, aunque el docente cumple muchas otras funciones dentro de alguna institución educativa, no debe obviar que es esencialmente un ser humano que participa directamente en el desarrollo humano de las nuevas generaciones.
Como profesores debemos desarrollar una conducta asertiva con las siguentes caracteristicas:
CONDUCTA ASERTIVA
La conducta asertiva es “cuando una persona posee la habilidad para transmitir y recibir
los mensajes de sentimientos, creencias y opiniones de una manera honesta, oportuna y respetuosa”
Una persona asertiva es una persona con necesidades, con el deseo de expresar
abiertamente lo que siente, piensa, honestamente; que gana influyendo, escuchando y
negociando de modo que otros elijan cooperar voluntariamente.
Existen componentes que conforman la estructura de una conducta asertiva:
a.Respetarse a sí mismo: concebirse a sí mismo como un ser humano con energía
limitada que necesita cuidarse.
b.Respeto por los demás: que los otros sean concebidos como seres humanos tratados
con dignidad y respeto.
c.Ser directo: garantizar que los mensajes transmitidos sean los suficientemente claros,
sencillos y precisos.
d.Ser honesto: la capacidad de comunicación se ve limitada cuando se niegan o se
minimizan los verdaderos sentimientos y se recurre a la mentira.
e.Ser apropiado: tomar en cuenta no sólo lo que se dice o escucha, sino el contexto y el
tiempo en que ocurre.
f.Control emocional: encauzar las emociones para que éstas no lleguen a niveles de
intensidad que provoquen reacciones ineficientes.
g.Saber decir: depende del objetivo que se persiga y del proceso y la estructura del
mensaje asertivo.
h.Saber escuchar: proceso activo que requiere un esfuerzo para comprender lo que los
demás quieren transmitir.
i.Ser positivo: reconocer e informar a los demás que hay un intento por beneficiar y
ayudar.
La comunicación es un proceso de trasmisión y recepción de ideas, información y mensajes, a través de diferentes canales y códigos. Esta comunicación profesor-alumno se da verbal y no verbal, las dos muy importantes, sobre todo porque estamos en un mundo muy visual, casi todo nos entra por los ojos. Debemos tomar en cuenta que los elementos necesarios para que se de una buena comunicación son: el emisor, el receptor, el mensaje, el código, el canal y el contexto. Si uno de ellos no se da bien, se rompe la comunicación o nos llega una comunicación erronea.
Debemos propiciar siempre como tutores y docentes una buena y clara comunicación con los alumnos asi como saber escuchar al otro para tener una comunicación asertiva.
seminariossite.wordpress.com 
El tema de la comunicación que fue expuesto en la pluralidad de sus dimensiones está íntimamente relacionado con el tema de la autoestima. Navegamos en un mundo que está saturado, en muchas ocasiones, por prejuicios y preconcepciones. No es el caso que lo prejuicios o las preconcepciones sean malos en sí mismos. El problema está en lo que hacemos con esos prejuicios. Por ejemplo, cuando estos impiden una comunicación asertiva con el otro, el prejuicio bloquea un diálogo que en lugar de hacernos crecer, empobrece nuestra visión de mundo. Por esta razón, la comunicación debe pensarse como un fenómeno complejo y abierto. Si existe una estima de sí y una estima del otro, los otros y lo otro, podremos ponderar mejor nuestra realidad. Por otro lado, es también cierto que a través del lenguaje construimos con preconcepciones el mundo en el que vivimos, en el que ya nos encontramos: historia, lengua, prácticas sociales, culturales y políticas, tradiciones, manifestaciones artísticas, etc. Consideremos igualmente el hecho siguiente. La intencionalidad de nuestro lenguaje varía constantemente, dependiendo del contexto en el que nos inscribamos. En el caso específico de nuestros estudiantes en formación emocional e intelectual, existe una confianza-desconfianza de la que no sólo ellos son responsables, sino todos nosotros como comunidad. Por esta misma razón, se vuelve imprescindible una comunicación constante que no busca abrumarlos, como si siempre nos quedamos con el papel de vigilantes de sus actos, sino como personas que pueden escucharlos y estar ahí cuando lo necesiten, sobre todo en el ámbito académico, que es el que como tutores más nos compete.
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Para la sociedad, la juventud es una etapa de transición entre la edad de la infancia y la adulta, pero para los jóvenes el mundo está anclado en su presente y lo más importante es vivir lo mejor posible el momento actual.
La juventud está agrupada por edad y por la forma de pensar y sentir su realidad parecida a la de otros jóvenes, donde se encuentra una gran diversidad de pensamientos y formas de vida a las que distinguimos como “tribus ” o grupos de amigos.
Los jóvenes que habitan el mundo complejo y cambiante de hoy, se organizan en espacios propios donde se acepte la diversidad de formas de expresarse ,integrándose paulatinamente a espacios públicos cada vez más exigentes y competitivos.
La comunicación de los jóvenes es variada y distinta a lo que estamos acostumbrados los adultos, hoy en día la comunicación no necesariamente es codificada, hay una comunidad virtual además de la real, se comparte infinidad de información en la red, hay una falta de diálogo cara a cara. Recibimos infinidad de información a través de las nuevas tecnologías y no toda la llegamos a procesar internamente.
Los adultos se deben de actualizar en los medios de comunicación y preguntar al joven cuáles son sus inquietudes, gustos y dudas, para poderlos orientar y comunicarse con ellos , puesto que la comunicación en los jóvenes es la misma únicamente cambian los símbolos y las formas de trasmitir el mensaje a algo que muchas veces no estamos familiarizado.
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Sin duda el profesor, y por supuesto los tutores, requieren mantener una comunicación abierta con sus alumnos para que sea posible desarrollar las actividades escolares en el mejor ambiente posible y, sobre todo, con canales de expresión e intercambio de información funcionales, que permitan un diálogo respetuoso, la reflexión conjunta, la libertad de expresión, la confianza mutua y la disposición a resolver problemas y trabajar colaborativamente. Por supuesto, dicha comunicación tendrá que ser auténtica; esto es, coherente entre el lenguaje verbal y el no verbal, entre las palabras y las acciones, entre el discurso y los hechos. Sólo así será posible ganar la confianza de los estudiantes y su involucramiento en las tareas que como profesores o tutores tratemos de abordar con ellos. Además, como docentes debemos evaluar constantemente si nuestra manera de comunicar instrucciones, requisitos, formas de trabajo, resultados esperados, conocimientos, etcétera, es en realidad adecuada y funcional. Bien podríamos descubrir que detrás de algunas fallas o errores de nuestros alumnos está nuestra propia incapacidad o deficiencia para comunicarnos con nuestros alumnos. Igualmente, debemos de mantener una comunicación asertiva con los estudiantes sin entrar en conflicto, sin agresiones, descalificaciones o insultos, y más bien estableciendo reglas y límites claros dentro de la clase, para las formas de interacción personal y para el establecimiento de un ambiente de aprendizaje o bien una dinámica grupal adecuados; esto es, fundados en valores y formas de interacción personal sanas.
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La comunicación concebida como un proceso complejo de intercambio con el otro, debe ser abierta, permisible, clara y distante del prejuicio. Considero que no puede haber diálogo sin una escucha activa que estimule con el tiempo un diálogo asertivo. Desde esta perspectiva la comunicación y en particular con el adolescente se aprecia como una actividad que debe agotar todos sus recursos para que el mensaje llegue con claridad a su destinatario. En el ámbito académico el docente debe ser muy cuidadoso de los mensajes que emite, pues en gran medida a través de ellos se puede ganar la confianza o no confianza del estudiante, lo cual puede resultar según sea el caso, en una condición que lo predisponga de manera favorable o no al diálogo académico.
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Silvia tu aportación es muy valiosa y coincido contigo, ya que gran parte de la responsabilidad para que se abra el canal de comunicación con los alumnos depende del docente y en cuanto se rompan las barreras de la hostilidad y logremos un acercamiento con ellos a través del diálogo y nos ganemos su confianza lograremos una mejora en el aprovechamiento académico y en su relación con la otredad.
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Tienes mucha razón Juana Silvia. Debemos esforzarnos para que los mensajes sean claros y lleguen al destinatario correctamente. Sucede mucho que los conflictos sociales o interpersonales son causados por errores en la comunicación: Quise decir algo, pero el otro lo interpretó de otra forma y si no se aclara a tiempo, se desencadena un conflicto.
Es un tema delicado, de hecho se dice que » los problemas de realciones sociales empiezan por la boca» y si se dejan crecer, se vuelven guerras. Como profesores y tutores nos corresponde poner mucho cuidado en las palabras que usamos, cómo transmitimos los mensajes, tanto verbales, como no verbales y también debemos hacernos responsables de nuestra forma de hablar porque es modelo para los alumnos.
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La comunicación es un proceso de intercambio de información y una necesidad de las personas de las sociedades con el objetivo de poder intercambiar informaciones y relacionarse entre sí. Desde que nacemos ejercemos la comunicación en las diferentes etapas de nuestras vidas y en diversos ámbitos, cuando los estudiantes llegan al bachillerato traen una formación y una educación establecida desde casa, es por ello que cada uno se relaciona de una forma específica, por lo que al convivir con sus compañeros o docentes lo hacen de la forma como fueron formados y ésta no siempre es la correcta, ya que a veces no es lo suficientemente asertiva, ya que no saben escuchar, juzgan, interpretan o simplemente no son empáticos con el otro. Es por ello, que el papel del docente es fundamental en esta etapa de su vida, ya que uno de nuestros propósitos es poderlos orientar para tengan una comunicación más efectiva con el otro. No debemos olvidar que como docentes somos un modelo para los estudiantes y gracias a nuestras enseñanzas y ejemplos ellos aprenderán en la práctica el significado de la comunicación. Mejor aún, cuando somos buenos escuchas y los atendemos con interés y respeto, abrimos los canales de comunicación y de esta forma recuperamos la confianza de los alumnos, creamos un mejor ambiente educativo y los podremos ayudar a mejorar las cuestiones personales y académicas.
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ALFONSO JAVIER GONZÁLEZ RODRÍGUEZ
No hay duda alguna de que toda sociedad, y el mundo en general, ha evolucionado de una manera acelerada a partir de la década de los años 80 del siglo pasado en todos los aspectos, como he podido percibirlo. La comunicación, tema tratado en nuestro seminario, ha adquirido nuevas facetas al respecto con la la invención y evolución de la tecnología: Tal parece que se vive actualmente en un mundo carente de relaciones interpersonales con la aparición de ésta última y pienso yo que el núcleo familiar es, en parte, responsable de este resultado. Propondría yo que tanto tutores como padres de familia realizáramos una «alianza» con el fin de afianzar la comunicación. Primeramente los padres ojalá dedicasen algunos minutos de su tiempo para escuchar a sus hijos; de ahí, a veces, la carencia de estos vínculos ( y otras muchas circunstancias) lamentablemente ha provocado la desunión familiar. En segundo lugar, si los tutores en su función también de docentes también lográsemos vínculos de comunicación con nuestros alumnos, a pesar de tener grupos numerosos y carga académica excesiva, podríamos lograr frutos abundantes en beneficio no nada más del estudiante, sino también de la sociedad donde nos desenvolvemos todos, gracias a una óptima comunicación. Labor ardua, mas no imposible.
Gracias y saludos a todos.
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La comunicación profesor- alumno, desde mi punto de vista, se debe desarrollar en un clima de respeto y, muy importante, cada quien en su sitio. Es decir, no podemos pretender relacionarnos con nuestros alumnos como si fuéramos sus amigos o sus “cuates”, porque nunca podríamos ponernos en su lugar, como si tuviéramos 15 años. Podemos ser amigables, comprensivos, pero nunca iguales que ellos. Ellos necesitan de esa diferencia; necesitan de una figura de autoridad, aunque por definición la rechacen. Podemos inspirar más confianza si representamos un apoyo que si nos llevamos “de a cuartos con ellos”.
Por otro lado, es importante estimular el uso correcto del lenguaje, porque los alumnos usan una lengua española trunca, deformada, pobre y al comunicarse con nosotros se ven obligados a usar la norma culta, porque, por lo menos nuestros alumnos, tienen claro cómo deben hablar con cada quien.
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Muy cierto Lilia, En la comunicación que debe haber profesor-alumno debe ser siempre con respeto, y bien ubicado tanto el papel del profesor como del alumno; podemos ser amigables y positivos como muy bien menciona Lilia. La clase no nadamas se debe enfocar en algun tema sino que parte de la comunicación la hacemos corriguiedo el lenguaje que a veces usan, hacerles notar el respeto que se deben todos, y procurarque esa comunicación sea clara, en el pedir estar el dar.
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La relación entre autoestima y asertividad consiste en que si no se tiene autoestima; si no se tiene convicción de que se es valioso al igual que los demás; si no se tiene la convicción de ser merecedor de los mismos derechos , y si se tienen ideas ilógicas, absolutistas y muy demandantes consigo mismo y hacia los demás, no se puede ser asertivo, defender los derechos y comunicarnos de igual a igual con los demás.
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Estoy de acuerdo con la reflexión del maestro Alfonso Javier
«Tal parece que se vive actualmente en un mundo carente de relaciones interpersonales con la aparición de ésta última y pienso yo que el núcleo familiar es, en parte, responsable de este resultado. Propondría yo que tanto tutores como padres de familia realizáramos una “alianza” con el fin de afianzar la comunicación»
Es verdad que necesitamos una comunicación más asertiva con nuestros alumnos pero para eso necesitamos la colaboración de los padres ya que ellos conocen más a sus hijos,nosotros los profesores únicamente los tenemos por un periodo de tiempo muy breve( ciclo lectivo)para lograr un avance efectivo.
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Como profesores y tutores debemos crear un ambiente que facilite la comunicación, permitir que el joven se sienta escuchado, y no criticado o juzgado, pues esto haría que perdiera la confianza en nosotros y estaríamos cerrando los canales de comunicación.
La comunicación eficaz requiere de habilidades sociales tales como escuchar empáticamente, transmitir claramente las ideas propias, entender y debatir acerca de las ajenas, negociar o mediar evitando que los desacuerdos se conviertan en conflictos irresolubles.
La acción comunicativa representa un papel de suma importancia para todo docente, cabe destacar que, aunque el docente cumple muchas otras funciones dentro de alguna institución educativa, no debe obviar que es esencialmente un ser humano que participa directamente en el desarrollo humano de las nuevas generaciones.
Como profesores debemos desarrollar una conducta asertiva con las siguentes caracteristicas:
CONDUCTA ASERTIVA
La conducta asertiva es “cuando una persona posee la habilidad para transmitir y recibir
los mensajes de sentimientos, creencias y opiniones de una manera honesta, oportuna y respetuosa”
Una persona asertiva es una persona con necesidades, con el deseo de expresar
abiertamente lo que siente, piensa, honestamente; que gana influyendo, escuchando y
negociando de modo que otros elijan cooperar voluntariamente.
Existen componentes que conforman la estructura de una conducta asertiva:
a.Respetarse a sí mismo: concebirse a sí mismo como un ser humano con energía
limitada que necesita cuidarse.
b.Respeto por los demás: que los otros sean concebidos como seres humanos tratados
con dignidad y respeto.
c.Ser directo: garantizar que los mensajes transmitidos sean los suficientemente claros,
sencillos y precisos.
d.Ser honesto: la capacidad de comunicación se ve limitada cuando se niegan o se
minimizan los verdaderos sentimientos y se recurre a la mentira.
e.Ser apropiado: tomar en cuenta no sólo lo que se dice o escucha, sino el contexto y el
tiempo en que ocurre.
f.Control emocional: encauzar las emociones para que éstas no lleguen a niveles de
intensidad que provoquen reacciones ineficientes.
g.Saber decir: depende del objetivo que se persiga y del proceso y la estructura del
mensaje asertivo.
h.Saber escuchar: proceso activo que requiere un esfuerzo para comprender lo que los
demás quieren transmitir.
i.Ser positivo: reconocer e informar a los demás que hay un intento por beneficiar y
ayudar.
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La comunicación es un proceso de trasmisión y recepción de ideas, información y mensajes, a través de diferentes canales y códigos. Esta comunicación profesor-alumno se da verbal y no verbal, las dos muy importantes, sobre todo porque estamos en un mundo muy visual, casi todo nos entra por los ojos. Debemos tomar en cuenta que los elementos necesarios para que se de una buena comunicación son: el emisor, el receptor, el mensaje, el código, el canal y el contexto. Si uno de ellos no se da bien, se rompe la comunicación o nos llega una comunicación erronea.
Debemos propiciar siempre como tutores y docentes una buena y clara comunicación con los alumnos asi como saber escuchar al otro para tener una comunicación asertiva.
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